VISIÓN BORROSA POR HIPERTENSIÓN EN EL EMBARAZO

El incremento natural en la tensión arterial experimentado durante el embarazo a veces causa visión borrosa o hacen que se vean puntos negros. Esto es bastante común ,pero en niveles excesivos , la hipertensión aumenta el riesgo de problemas mas graves como el desprendimiento de retina.

De hecho ,esos puntos en la visión podrían ser escotomas, que resultan indicativos de una preeclampsia (hinchazón ,tensión alta y proteinuria) o eclampsia, complicaciones que a veces provoca que la tensión arterial sea peligrosamente alta.

Los escotomas no deben confundirse con las “moscas flotantes” que se mueven a lo largo del campo visual y que no suelen revestir un riesgo especial.

Ojo seco. ¡Mantén tus ojos a salvo!

El ojo seco es una alteración que se produce en la superficie de la córnea y la conjuntiva por falta de lagrima o porque esta es de mala calidad. Los síntomas son variados, desde el picor, escozor y enrojecimiento del ojo, hasta visión borrosa y sensibilidad a la luz.

Los agentes externos durante todo el año que pueden afectarnos van más allá de los efectos del astro solar.

Desgraciadamente vivimos rodeados de contaminación ambiental algo que influye en nuestros ojos. Dependiendo de las ciudades donde vivamos e incluso de nuestro trabajo, sus efectos nocivos pueden ser más o menos altos. Vivimos rodeados de por gases de combustión, de aerosoles, pesticidas, humo de los cigarrillos, de los escapes de humo de los coches partículas emitidas, así como alérgenos como el polen, polvo o pelo de los animales domésticos.

El grado de repercusión depende de cada persona y de la concentración del contaminante, pero de una forma u otra le afecta a nuestro organismo y en concreto a nuestros ojos.

Los agentes en interiores nos afectan de igual manera, la calefacción en invierno y el aire acondicionado en verano harán aumentar la posibilidad de molestias, si trabajamos delante de un ordenador y como consecuencia, parpadeamos menos veces por minuto, es muy probable que aumentemos las molestias.

En adultos, con los tratamientos asociados a la edad puede verse potenciarse todos estas molestias ya que tratamientos incrementan la sequedad como los destinados a tratar la hipertensión o el Parkinson.

Buscando la mejoría.

Dependiendo de la causa de la sequedad ocular y las molestias, tendrás que buscar la solución adecuada para solucionarlo. En cualquier caso, es necesario que sigas estas pautas:

1.-Dale importancia a la alimentación.

Nuestros ojos también notan si nos estamos alimentando bien o no, de hecho se ha demostrado que seguir una dieta rica en frutas y verduras antioxidantes, en la que se incluyan con frecuencia alimentos ricos en ácidos grasos Omega 3, y se ingiera al menos dos litros de agua al día, ayuda a evitar la sequedad ocular. En algunos caso ,los especialistas recomiendan la toma de suplementos con ácidos grasos Omega 3 para prevenir la afección conocida como ojo seco.

2.-Optimiza el grado de humedad de las estancias.

Es importante para evitar la sequedad ambiental. Se recomienda que el grado de humedad este entre el 35 % y el 45 %.Para conseguirlo, nos podemos ayudar de un humidificador o colocar recipientes de cerámica con agua cerca de los radiadores para que se evaporice el agua.

3.-Ventilación.

Aunque haga frió, tenemos que adquirir la costumbre de ventilar las habitaciones al menos una vea al día. Se recomienda que sea a primera hora del día y durante unos diez minutos.

4.-Lagrimas artificiales.

El óptico-optometrista te recomendara su uso, no solo para evitar la sequedad ocular, sino para suavizar la superficie corneal y garantizar la hidratación. Pregunta a un profesional cual es el tipo de lagrima que te conviene, existen en el mercado una gama muy amplia de productos especializados en cada caso.

Las ultimas lagrimas artificiales se incorporar sobre el parpado directamente, regulan la cantidad de lípidos en la superficie de la córnea para impedir que se seque y aliviar los síntomas del ojo seco.

Navidad a la vista. Protege tus ojos de los excesos.

Descuidar la salud durante las celebraciones navideñas puede acarrear efectos negativos a todo nuestro organismo, incluido los 

ojos

Nos acercamos a unas fechas en las que en el ambiente se respira felicidad, solidaridad, optimismo, alegría, es navidad. Para la mayoría de las personas por uno u otro motivo, son días especiales en los que se comparten más momentos con la familia y amigos. En nuestra cultura este tipo de celebraciones se suelen situar alrededor de una mesa, algo que no podemos negar que nos encanta, pero que puede repercutir negativamente en nuestra salud si no tenemos control. Incluso las personas que se cuidan durante todo el año suelen hacer un paréntesis y darse caprichos culinarios que no repercuten demasiado estos excesos pero en las personas que no lleva un estilo de vida saludable o padecen alguna enfermedad, estas fiestas, pueden agravar su estado.

Al aumento del consumo de bebidas alcohólicas tenemos que añadir que se fuma con mayor frecuencia, incluso en personas que ya lo habían dejado, esta época resulta un verdadero reto para ellos porque se enfrentan a la tentación de volver a fumar.

Los datos que nos proporciona la Fundación Española del Corazón, van a confirmar estos excesos, al terminar la Navidad los niveles totales de colesterol llegan a incrementarse un 10 %, mientras que se calcula que cada español aumenta un 50% la ingesta de calorías se permiten durante el resto del año. En una persona sana, que realiza ejercicio y sigue una dieta equilibrada,  recomendadas, lo que conlleva subir ente dos y tres kilos de peso. A su vez desde el Servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario del Vall d`Hebron se advierte que los exfumadores presentan más posibilidades de volver a coger el cigarro.

LOS EXCESOS LLEGAN A LOS OJOS.

Cuando hablamos de las consecuencias que conllevan estos nos centramos en hablar del exceso de peso y del aumento del riesgo de sufrir un accidente cardiovascular, pero nos olvidamos que también repercuten en otras partes del organismo, como son los ojos.

La subida de la tensión arterial, de los niveles de glucosa en sangre, el tabaco, y el sedentarismo repercute directa y negativamente en nuestra salud visual, ¿sabes cómo?

Tensión descontrolada. El aumento de tensión arterial puede provocar visión borrosa en las primeras fases, pero si el problema no se controla los efectos pueden ser más graves e incluso provocar retinopatía hipertensiva (destrucción de los vaso sanguíneos que alimentan la retina).

Demasiada azúcar. Los postres y los dulces navideños, el roscón de Reyes… debemos consumirlos con moderación sobre todo las personas que padecen diabetes. De igual manera que en el caso de la hipertensión, la diabetes no siempre se presenta con síntomas específicos con lo que se complica su control. Un mal control de los niveles de glucosa en sangre puede causar:

-Cambio de graduación.

-Visión doble.

-Opacidad del cristalino.

-Glaucoma.

-Alteración en la percepción de los colores.

Pierde de vista el tabaco. En Navidad el consumo de tabaco aumenta, especialmente entre los considerados “fumadores sociales”, ya que en estas fechas, entre fiestas, cenas de empresa, comidas familiares se fuma con más frecuencia de lo habitual. No caigas en la tentación, los problemas que genera el consumo de tabaco a nivel de los ojos son muchos: Acelera la DEMAE (Denegación Macular asociada a la edad), daña el Nervio Óptico, acelera la Retinopatía Diabética y las cataratas ,así como, aumenta los síntomas de Ojo seco.

APUESTA POR LA MODERACION